Si esperas al amor de tu vida, se te va el colectivo bajo la lluvia... ¡Ay!, no siempre vale la pena.
Mirar hacia el cielo es un absurdo cuando no sabes lo que en él puedes encontrar. En literatura nunca será lo mismo hablar de tejocotes que de ciruelas. Si no te llamas a tiempo, puedes encontrar ocupada la línea de emergencia.
0 comentarios:
Publicar un comentario